Los Moto ejemplifican virtualmente todos los estereotipos negativos con los que el Clan del Unicornio en su conjunto ha bregado desde su regreso al Imperio siglos atrás. La sangre Gaijin es más evidente en ellos que en cualquier otra familia, con su complexión pequeña y achaparrada. Son alternativamente alborotadores y bruscos, dependiendo de las circunstancias, y rara vez encajan bien con los samuráis de otros clanes. Sin embargo, son respetados por sus tradiciones marciales.
