Provincias de la Familia Kuni.
Los Kuni nunca han sido una familia propensa al lujo, y muchas de sus tierras han sido conocidas desde los albores del Imperio como lugares con repugnantes pantanos, páramos sombríos y campos fangosos. Sin embargo, el estatus de sus tierras cambió drásticamente en el siglo VIII, cuando las fuerzas de la Fauce atacaron. La mayoría de las tierras de los Kuni quedaron Manchadas, y aunque el territorio se recuperó tras la construcción de la Muralla Kaiu, los Kuni pronto descubrieron que la única forma de eliminar la Mancha es purgar también a todos los demás espíritus de la tierra. Así nacieron los Yermos Kuni.
Los Yermos son estériles y sin vida, un paisaje de tierra gris y sombría sin una sola planta o animal. La tierra está salpicada de pequeñas chozas y cuevas en las que los Kuni viven y realizan sus experimentos, a menudo solos, o en el mejor de los casos en pequeños grupos. Los alimentos y otros suministros deben serles llevados, ya que no pueden cultivarse en la zona sin vida.
No hay aldeas en los Yermos; las pocas que sobreviven en las dos provincias kuni se encuentran en la minoría de tierras que escaparon a la Mancha. De hecho, en los Yermos no hay heimin en absoluto, salvo ocasionales sirvientes personales.