Situado a quince kilómetros al norte de Bishamon Seido, este pueblo alberga un santuario dedicado a Benten, la Fortuna del Amor Romántico, el único santuario dedicado a esa Fortuna en las tierras León. El santuario tiene su origen en acontecimientos del siglo X, cuando los samuráis Kitsu Kozu y Doji Echiko mueren en defensa de su amor, un amor que abrazan a pesar de que sus clanes están en guerra. El Campeón del Clan que condena a la pareja se avergüenza cuando Kozu obedece a su señor arrasando la ciudad de su amada... y cometiendo después seppuku en señal de protesta. El Campeón del Clan se retira y luego construye el santuario en memoria de la pareja. A su muerte, las cenizas del antiguo Campeón se esparcen alrededor del santuario y de esta tierra brotan crisantemos de un tono azul.