Los Denon son altos y tienen un pelaje no muy abundante que suele ser de colores oscuros en los hombres, y más vivos en las mujeres. La constitución como en otras razas puede variar, pero su genética les predispone a una constitución recia. Sus ojos son poco mas grandes que los de los humanos y su vista además es buena, pero mejora con la oscuridad. A su altura y predisposición a una buena constitución se le añaden la fuerte cola que poseen. Esta puede distar entre uno o dos metros aproximadamente; gozan de gran agilidad y equilibrio. Tienen, afiladas garras en sus manos y colmillos en sus mandíbulas. A pesar de esto, tienden a ser pacíficos.
Hay estudiosos que defienden que, dado como el tiempo ha mellado en esta raza, deben provenir de zonas de gran altitud. Esta hipótesis se basa en la agilidad poseen gracias a su cola, y por ello sitúan su origen en las zonas más recónditas de Arengiel. Los denon alcanzan la madurez alrededor de los 14 años y rara vez viven más de 60 años.
Nacidos en los acantilados y de paso seguro, los denons se mueven con una gracia deliberada y repentinos estallidos de fuerza. Sus colas prensiles y sus garras trepadoras hacen que los puentes de cuerda y las paredes escarpadas parezcan terreno llano, mientras que sus tradiciones, entretejidas con la tempestad, muestran su poder para domar y usar las tormentas.