● No puede moverse.
● No puede realizar ninguna otra acción. Si la realiza, la oración se interrumpe.
● Si recibe daño, la oración se interrumpe.
● Debe llevar a cabo una tirada de conjuro en cada asalto. Cada asalto en que tenga éxito en su tirada, suma un +1% acumulativo de
posibilidades de captar la atención de su deidad. Si falla la tirada el intento queda abortado y no puede volver a orar hasta que haya hecho
acto de expiación.
● Al final de cada asalto debe decidir si lanza el d100 y trata de llamar la atención de su deidad.