A pesar de su ambicioso nombre, Kyuden Suzume es en realidad poco más que dos edificios de una planta con un santuario entre ellos. Los visitantes a veces lo confunden con un almacén, y su título de "Kyuden" sólo se permite debido al respeto del Emperador por los ideales de los Gorrión. Los edificios carecen de cualquier tipo de decoración y, de hecho, intentar mantenerla en el duro entorno de las tierras Gorrión sería inútil aunque el clan dispusiera de recursos para dedicarse a ello.
El interior del edificio principal alberga una gran sala de audiencias que hace las veces de dojo, el único dojo de las tierras de los Gorrión hasta la construcción de uno externo en el año 618. El segundo edificio contiene la residencia del Campeón del Clan Gorrión y su familia inmediata, así como unos cuantos consejeros y sirvientes de honor. El interior del castillo también alberga las únicas obras de arte de los Gorrión, en su mayoría pantallas shoji y estatuas.
El santuario central está dedicado al fundador del clan, con un santuario más pequeño para la Dama Doji, fundadora del Gran Clan padre de los Gorrión. Otro pequeño santuario venera al Sol (Dama Sol durante la mayor parte de la historia, Yakamo después ).
La característica más notable del castillo es invisible para los forasteros: un laberinto de túneles y salas subterráneas bajo la fortaleza que se extiende kilómetros en todas direcciones. Aquí se encuentra la biblioteca de la familia Suzume, donde los pergaminos se guardan a salvo de las innumerables destrucciones que los encontrarían arriba. Las entradas secretas a estas madrigueras salpican el paisaje, ocultas por el follaje y la maleza. Muchos gorriones pasan días enteros en estos túneles sin ver el sol, pero afirman que les da tiempo para la contemplación y la serenidad.
