La, la, la,
lalala lala la.
La, la, la,
lalala lala la.
La, la, la,
lalala lala la.
La, la, la,
lalala lala la.
En mi nación,
Me dijo un pescador,
que alguna vez,
me tragaría un pez.
Yo contesté,
que no podría ser,
refunfuñó,
¿cómo? me preguntó.
Yo sé bailar,
y lo puedo esquivar,
aseguré,
sin miedo a perder.
Él se rió,
y me aseguró,
que al nadar,
no podría bailar.
Entonces vi,
su bote carmesí,
lo señalé,
En eso montaré.
Y además,
en nuestra sangre va,
por fortuna,
soy de Medialuna.
La, la, la,
lalala lala la.
La, la, la,
lalala lala la.
La, la, la,
lalala lala la.
La, la, la,
lalala lala la.