Reclamados por las tribus gnolls de Kaer Aramnin, esta cordillera de gran altura, formas suaves y fácil escalada separa las tierras fértiles y pobladas de la costa occidental de las llanuras pedregosas y baldíos áridos del interior de Shabana. Además de los gnolls (hombres hiena), las bestias salvajes son abundantes, especialmente los dracos de arena y otros depredadores aéreos. Aunque muchos comerciantes deciden rodearlas por el norte o el sur hasta Puerto Tarter, los más atrevidos tratan de cruzar su valle central para acortar camino con la esperanza de ocultarse de los hombres hiena o poder negociar el paso con alguno de sus chamanes.