El joven Seix, nacido de una familia de nobleza baja en una triste ciudad junto al Mar Resplandeciente, en el Imperio Élfico, fue atormentado toda su vida por aquellos que los veían como inferiores, humanos entre elfos. Aún así, Seix creció buscando la justicia y el bien, perdonando a aquellos que le odiaban, y cuidando de los que necesitaban ser defendidos. Encontró a temprana edad, su fuerza de voluntad respaldada por una entidad desconocida, Seix se encontraba bajo la mirada Bahamut, el dios de la Justicia y la Nobleza. Hasta que una de las casas que consideraba a esta familia inferior, acabó con sus padres y mandaron cazar al joven Paladín.
Seix huyó a Pilzander, donde aprendió a valerse por si mismo y a ser cruel e inecesariamente tiránico con aquellos que un día defendía. Conforme su notoriedad ascendía en los círculos más oscuros de la ciudad, Seix caía más en la falta de delicadeza, lo que un día le podría haber costado la vida. Sin embargo, los Pastores de Hierro, lo encontraron antes, y Ayelen, secretamente enamorada del apuesto joven, deció tomarlo bajo su tutela y enseñarle a canalizar la energía que surgía de su voluntad para el mal.