Los Magistrados Esmeralda eran los encargados de hacer cumplir las leyes del Emperador, respondiendo únicamente ante el Emperador y el Campeón Esmeralda. Tenían amplios poderes para lograr este objetivo, incluido el derecho a reclutar ayuda, celebrar juicios e imponer castigos, aunque sus poderes sólo se aplicaban en casos aplicables a la ley Imperial, no a la local.