También conocida como Academia de Duelo Kakita o Shiro Sano Kakita, esta extensa combinación de castillo, finca amurallada y enorme dojo es el caldo de cultivo de casi todos los grandes logros artísticos de la historia de Rokugán. Esto incluye, por supuesto, el arte del iaijutsu, del que el propio Kakita fue pionero. Los artesanos Kakita se consideran el ideal con el que todos los demás artistas deben compararse; su confianza roza la arrogancia, pero con razón. Shiro sano Kakita es un lugar donde cortesanos, artesanos, shugenja y bushi se entremezclan para producir la magnífica cultura de la casta samurái de Rokugán.
Los salones de Shiro sano Kakita están dominados por los famosos duelistas de la familia, pero también se encuentran aquí artesanos de todo tipo y de todas las familias de la Grulla. Siempre hay un puñado de estudiantes de otros clanes, que han intercambiado valiosos favores por la oportunidad de pasar un año bajo la tutela de los Kakita.
Sin embargo, no todo es gloria. Hay una maldición sobre el castillo de los Kakita, una de la que todo el mundo ha oído hablar, aunque pocos son lo bastante rudos como para mencionarla en público. Se dice que un Gran Maestro de los Elementos dijo una vez a un daimyo Kakita que le esperase como invitado, y el Grulla abrió de par en par las puertas del palacio para prepararse. Pasaron los días y por fin llegó el venerado shugenja, pero justo cuando se acercaba una repentina ráfaga de viento cerró de golpe las puertas. El Gran Maestro se enfureció por el insulto y maldijo al castillo por su impropiedad: cualquier Grulla que nazca dentro del palacio mientras las puertas estén cerradas tiene la maldición de no desenvainar nunca el acero para no volver las espadas de la Grulla unas contra otras. Por ello, desde aquel día, los Kakita han procurado dejar abiertas las puertas del castillo, no sea que se active la maldición.
Sólo una vez en la historia del Imperio, Shiro sano Kakita es atacado. Ocurrió durante la Guerra de los Clanes, cuando un ejército de incursión Cangrejo que avanzaba desde el Paso de Beiden consiguió llegar al castillo, abrir una brecha en las murallas e incendiar la torre principal. Afortunadamente, los Cangrejo son incapaces de mantener su presencia y los daños se reparan rápidamente tras la guerra. De hecho, la Grulla considera la reparación del palacio Kakita una de sus mayores prioridades.