La posada de los Tres Sauces es un lugar pequeño, adecuado a su entorno rural, y al calor de la tarde sólo se encuentran en su sala común unos pocos campesinos de aspecto cansado. La posadera, una mujer delgada y canosa llamada Yanshi, se mueve con calma por la sala, sirviendo té a sus clientes en un digno silencio.
En el mes de Doji , 1137 (Verano) los Héroes de Rokugán se han reunido en la pequeña aldea de Shidareyanagi Mura, en el sur de las tierras del Fénix, para ayudar a un monje local en el establecimiento de un santuario a la nueva Fortuna del Noble Sacrificio, Toturi Kaede. La aldea fue elegida porque es el lugar al que Kaede y su aliado, Seppun Ishikawa, llevaron clandestinamente al joven Hantei Sotorii durante el Golpe del Clan Escorpión, impidiendo así que Bayushi Shoju acabara con el linaje Hantei y reclamara el trono para sí. Los efectos de esa decisión se hicieron eco hasta el Segundo Día del Trueno y más allá, pero nadie puede negar que la propia Kaede cumplió con su deber como debe hacerlo un verdadero samurái. La ubicación un tanto aislada y la complicada historia de este momento de la vida de Kaede se han combinado para hacer del templo una tarea de prestigio relativamente bajo, por lo que el daimyo ha ordenado a los Héroes que ayuden en su construcción.