Durante el Amanecer del Imperio, los heimin apilaban sacos de arroz en un cuadrado en Otosan Uchi, y se acordaba cuántos representaban un koku. Este arco, llamado Arco de Daikoku, se construyó sobre los sacos, para que nunca se perdiera la medida que contenían.
Valor variable
El koku se basaba en la cosecha de un año, por lo que el valor de los artículos podía fluctuar mucho de un año a otro, lo que hacía difícil prever el coste de los bienes y servicios (distintos del arroz) de un año a otro.