Símbolo: Moneda
con ojo grabado.
Alineamiento: Legal
maligno.
Dominios sugeridos:
Engaño, conocimiento.
Denominación de
seguidores: Kyreshaya.
Kyresh es el dios del
comercio.
Historia:
Originado a partir del
Ayndhil, como el resto de sus hermanos y hermanas, viajó por el
mar de estrellas hasta alcanzar el mundo al que nombraron como Eektaia, donde hallaron resistencia por parte de unos seres cósmicos
que lo asolaban. Tras vencerlos se asentaron en él, y comenzaron a
moldearlo según sus caprichos.
Junto algunos de sus
hermanos y hermanas, dieron vida a los titanes, para que guardaran el
mundo del regreso de los entes cósmicos y garantizaran la primera
línea de defensa contra ellos, en caso de ser necesario.
Al ser conocedor del
idilio de Ulthos e Innathar, y de su embarazo, Kyresh no pudo sentir
otra cosa que decepción, y comentó que le resultaba vanidoso por
parte de sus hermanos lo que estaban haciendo, pues sentía que ellos
se querían dar importancia por encima del resto de sus hermanos y
hermanas. En el tiempo venidero, mientras los dioses continuaron con
la creación, Kyresh acudió a Ulthos para reprocharle que lo que
hacían no estaba en sus planes originales para eektaia y lo acusó
de egoísta por solo pensar en sí mismo, a lo que Ulthos le
respondió que era él quién carecía de la alegría y amor hacia la
venida de sus futuras sobrinas, lo que desembocó en una fiera lucha
entre ambos dioses que duró 28 días y 28 noches, hasta que nacieron
las diosas y ambos se apaciguaron.
Kyresh regaló a cada niña
una pulsera de diamantes, aunque no lo terminaba de aceptar, pero no
quería continuar con la disputa y prefirió continuar con la
creación en paz.
A medida que se
desarrollaban las civilizaciones, los dioses fueron otorgándolas
conocimientos para su desarrollo y el papel de Kyresh fue el de
instruirlas en el comercio y las relaciones diplomáticas, para que
pudieran mercadear en paz entre ellas.
Cuando regresó Felthor de
sus viajes planares fue a visitar a Kyresh, al cuál le enseñó unos
cristales púrpuras que había traído consigo y le contó que su
cometido era el de devolver a los dioses la eektaia que habían
tratado de concebir de forma original. Además le advirtió de la
amenaza que suponían las creaciones para los dioses, pues lo había
visto en otros planos. Así Kyresh colaboró en el plan de Felthor
para darle una lección a sus hermanos y hermanas, y le vendió
información sobre Brina, la humana más apegada de Innathar. Más
adelante, apoyó a Felthor en su discurso y despojaron a las
creaciones de la inmortalidad, así como se creó el ayndhiltium y
quebrantorium, y la reencarnación de las almas.
Pasaron largos siglos,
hasta que Xanth fue a visitar a Kyresh para que tasara uno de los
cristales púrpuras de Felthor, y sin problemas le reveló a su
hermano la información que poseía sobre ellos, que era la que le
había contado cuando fue a visitarlo.
Por los problemas que
tuvieron con los seres aberrantes y la creciente oleada de seres
infernales que llegaban a través de portales, Kyresh junto a Xanth y
Ulthos crearon a los seres celestiales para que sirvieran a sus
órdenes, y perfeccionaron el ayndhiltium para que estos seres
pudieran habitarlo.
Tras la guerra contra los
infernales y el juicio posterior de Waldaia, Kyresh se separó del
resto de sus hermanos y comenzó a implicarse más con las especies.
Esto provocó un desliz en su comportamiento y mantuvo relaciones
afectivas con una mortal que se dedicaba a ser intermediaria
comercial en el mercado de Ysqal, llamada Eriss, con la que tuvo un
hijo al que nunca reconoció, llamado Kylik.
Los dioses notaron que se
implicaban demasiado con las especies, así que acordaron abandonar
el plano terrenal de eektaia para ir a residir al ayndhiltium, desde
donde vigilarían que se cumplen los preceptos divinos.
Vínculos:
De origen Ayndhil, al
igual que sus hermanos los dioses Felthor, Shontor, Ulthos y Xanth, y
sus hermanas las diosas Ennavar, Innathar, Kuvara y Rakath, tío de
las diosas Briganth y Waldaia, del dios Orander, y de la semidiosa
Alea, y padre del semidiós Kylik.
Doctrina:
Cuida tus pasos y
perfecciona el plan, más vale ser precavido que actuar sin
conocimiento. No cedas a tus instintos afectivos, podrían
desestabilizar tu cometido. Trata de ir un paso o dos por delante de
tus rivales, así siempre podrás adaptarte a la situación. No dejes
que otros manejen tu dinero. Establece lo que deseas conseguir, y
tras esto, haz lo que sea necesario para llevarlo a cabo. Evalúa a
tus rivales y aprovecha sus debilidades, y no dejes que te vean
vulnerable, se aprovecharán de ello.
Rituales:
Los clérigos y sacerdotes
del culto Kyreshaya rezan a su dios cando van a negociar, antes de
cerrar un trato y justo después de cerrarlo, agradeciendo la guía.
Para ello, se ponen de rodillas y sostienen el medallón de Kyresh,
mientras desean tener éxito en su negocio.
Los Kyreshaya además
invierten en las festividades con parte de su patrimonio, pues desean
que triunfen para conseguir rédito económico de ellas y honrar así
a su dios.