De aspecto sabio y reflexivo, el anciano Octanu es una de las caras más reconocibles del Saenadan. El que fuera alcalde de Iminantor durante más de una década se encarga de legislar sobre el comercio miriense y mantener al ejército perfectamente abastecido para la guerra.
Su
gran experiencia en el mercado del acero y sus buenos lazos con los
enanos de Kiralizor le sirvieron el puesto en el Saenadan. La volátil
economía de guerra y las temporales ausencias de recursos lo han
obligado a legislar a favor del ejército provocando
desabastecimientos temporales en las ciudades mirienses, lo que le ha
granjeado el odio de las clases trabajadoras.