El origen de esta organización se encuentra en el Albor de los Peregrinos, cuando, tras un increíble ritual que transformó la faz del oeste de Voldor, algunos dragones cambiaron de perspectiva sobre cómo combatir a la raza de las estrellas. Cytrawsealanthar, la dragona de cobre, la creó con el propósito de socavar las obras de los Peregrinos mediante el uso de sus esclavos. Los actos de sabotaje y asesinatos se contaron entre sus tácticas favoritas, pues había quedado claro que la confrontación directa era demasiado arriesgada contra criaturas de tal poder.
Durante más de dos mil años la organización realizó todo tipo de ataques, haciendo que los trabajos en Sananda se demorasen, convirtiéndose en un objetivo prioritario para los Peregrinos de la región. Los caminos en Vajra estaban celosamente guardados por los vajresht, por lo que establecieron campamentos y lugares seguros en la superficie, al amparo de los bosques primigenios. Con el liderazgo de Cytrawsealanthar, los miembros del Pacto sobrevivieron a incontables emboscadas y ardides, pero, tras el ataque a Miilvemax, la organización casi pereció.
Durante los casi cuatrocientos años que la dragona estuvo curándose de sus heridas, el Pacto de Cobre fue perseguido y casi eliminado; primero por la vengativa mano de Mornafel y, posteriormente, por sus emisarios. Sus miembros fueron aniquilados y a los supervivientes no les quedó más remedio que esconderse indefinidamente, a veces dejando de lado sus juramentos, otras pasándoselos a sus descendientes. Cuando regresó, Cytrawsealanthar tuvo que reconstruir la organización prácticamente desde sus cimientos.
En la actualidad, el Pacto de Cobre se dedica a buscar, identificar y eliminar todo rastro de la influencia de los Peregrinos, así como evitar cualquier daño a los habitantes de Sananda que provengan de estos. Los miembros del Pacto son individuos de distintas razas que habitan la Llanura Interminable y que tienen algún rasgo destacable. Cytrawsealanthar los escoge personalmente, aunque cualquier miembro puede delegar en otros una tarea, ya sea contratándolos o apelando al bien del pueblo de Sananda. En el caso de que destaquen por sus buenas intenciones y aptitudes, un miembro del Pacto puede hacerles entrega de una moneda de cobre. Estas monedas tienen grabada la efigie de un dragón y un conjuro atado a ellas, de manera que Cytrawsealanthar puede conocer su localización y los demás miembros reconocer su autenticidad. Hay veintinueve en total, aunque la dragona de cobre solo ha repartido poco más de dos tercios. Los portadores de las monedas son los únicos que pueden acceder al archivo del Pacto de Cobre, conocido por el sobrenombre de los Veintinueve Escalones.