Los impíos, o diablillos, pueden encontrarse en cualquier de los Planos Inferiores, ya sea realizando encargos para sus maestros infernales, espiando a sus rivales o engañando y despistando a criaturas mortales. Los impíos sirven con orgullo a cualquier amo malvado, pero no se puede confiar en ellos para que lleven a cabo tareas veloz o eficientemente.
Los impíos tienen la capacidad de asumir cualquier forma animal, pero su verdadero aspecto es el de un humanoide de piel roja con una cola con púas, pequeños cuernos y alas correosas. Son maestros en el arte de hacerse invisibles antes de atacar a sus rivales con su aguijón venenoso.