Los demonios cerdo, o nalfeshnees, son uno de los demonios más grotescos: una corpulenta mezcla de mono y jabalí el doble de alta que un humano, con alas emplumadas que parecen demasiado pequeñas para su cuerpo hinchado. Sus rasgos brutales ocultan una inteligencia y astucia notables.
Los nalfeshnees son devastadores en combate, ya que utilizan sus a las para volar por encima de las primeras filas y llegar a los adversarios vulnerables, a los que despachan casi sin esfuerzo. Desde el fragor de la batalla , comandan telepáticamente a demonios menores mientras inspiran una sensación de temor entre las fuerzas enemigas, obligándolas a dispersarse y huir.
Los nalfeshnees se alimentan de odio y de desesperación, pero ansían carne de humanoide por encima de todo. Mantienen sus despensas llenas de mortales secuestrados en el Plano Material, que posteriormente devoran vivos en elaborados festines. Los nalfeshnees se consideran sofisticados y refinados, y utilizan cubiertos oxidados para alimentarse.