Cualquiera que contrate a yugoloths para una tarea suele acabar tratando con un yagnoloth, o yugo teniente. Estos extraños infraplanares, astutos negociadores, se encargan de redactar los contratos para sus compañeros yugoloths. Una vez que un yagnoloth es contratado, comunica los deseos de su empleador a los yugoloths que comanda.
Aunque se les confía la dirección de yugoloths menores, los yagnoloths reciben en última instancia las órdenes de los arcanaloths o yugos superiores. Aparte de sus comandantes, los yagnoloths tienen plena autoridad sobre los yugoloths bajo su mando y esperan que les obedezcan. Los yagnoloth siguen los dictados de los contratos que negocian, pero siempre incluyen un resquicio para eludir sus obligaciones si la situación lo requiere.
Un yagnoloth tiene un brazo de tamaño humano y otro de tamaño gigante. Durante las negociaciones, el yagnoloth utiliza su brazo de tamaño humano para redactar y firmar los contratos. Cuando es necesaria una demostración de fuerza o cuando se une al combate, ataca con su brutalmente poderoso brazo gigante.