El mago

Kranos acompaña al grupo que queda maravillado ante la ciudad de Omu. A pocos metros de la entrada se encuentran con una especie de cabaña a la que el clérigo los invita a pasar. Una figura delgada, alta y joven con un bastón en su mano se encuentra dentro de la cabaña y les indica que ya era hora de que llegaran ya que los estaba esperando. Elsenid Ufrain se presenta ante el grupo y les indica que tomen asiento. Les comenta que ya sabe porque están en Omu y que sin lugar a dudas la vasija se encuentra en la ciudad, pero escondida en la denominada Tumba de los Nueve Dioses, la cual está sellada por nueve tokens resguardados en nueve templos.
 
Antes de continuar, Elsenid les informa que se alegraran de saber que su amigo Danki no solo se encuentra bien, sino que está hospedado una de las habitaciones y los invita a reencontrarse con su compañero. El grupo se apresura hacia la habitación donde se encuentran con el enano completamente desnudo y feliz de verlos de nuevo. Danki les cuenta que luego de volver a la cueva y encontrar una pista que lo llevaría a ayudar a su padre se perdió en la jungla y fue rescatado por Elsenid cuando estaba moribundo. El enano pregunta donde se encuentra Camus ya que tiene unos pergaminos arcanos que quizás el elfo pueda leer. El grupo no sabe como darle la noticia a Danki hasta que Elanord se adelanta y le dice llanamente que Camus está muerto.

Reencuentro

Mientras Danki está procesando la noticia comienzan a escucharse golpes en la puerta. Kranos ingresa y le pregunta al enano como se siente y le indica al resto que aunque le encantaría poder quedarse a charlar no tienen tiempo que perder. Los invita a pasar al comedor para poder tener un almuerzo apropiado y contarles que es lo que sabe sobre los tokens y la Tumba de los Nueve Dioses. El grupo se dirige al comedor donde se encuentra con variedad de comida en abundancia y al mago Elsenid sentado en la cabecera de la mesa. Tomando asiento alrededor de la mesa, todos se disponen a comer.

La ciudad prohibida

Elsenid comienza a contar la historia de Omu y la Tumba. Hace siglos, Omu era la ciudad dorada de Chult, un paraíso donde la gente vivía en paz y armonía. Pero lamentablemente la codicia y el poder comenzaron a corromper a los altos mandos de la ciudad que comenzaron a pedir mas tributos e impuestos a sus habitantes, algo que provocó la furia de Ubtao, el Dios de Chult. Debido a la furia del Dios, todos los clérigos perdieron sus poderes y la ciudad quedó a la deriva. Los nobles huyeron con sus riquezas dejando a los habitantes menos afortunados a su suerte. Con el tiempo todas las monedas fueron fundidas y vendidas como oro, las estatuas y las construcciones comenzaron a corromperse y la ciudad cayó en la desgracia y el olvido convirtiéndose en la "ciudad prohibida". Con la ausencia de Ubtao, unos espíritus aparecieron en la jungla y se dirigieron a Omu para molestar a los pocos habitantes que quedaban. Los espíritus prometieron poder y riquezas a los omuenses a cambio de devoción y lealtad, pero era solo un engaño ya que los espíritus no podían otorgarles poderes. Los omuenses buscando redimirse derribaron los templos de Ubtao y construyeron nueve templos, uno para cada Dios embaucador. Es en esos templos donde se encuentran los tokens.
 
Durante 90 años los "dioses" realizaron pruebas para elegir al clero al que le otorgarían poderes, pero en realidad solo eran una manera de divertirse a costa de los omuenses. Estas pruebas llamaron la atención de Acererak, un archiliche que coleccionaba almas. El liche llegó a la ciudad de Omu y dió muerte a los nueve dioses, esclavizo a los habitantes de Omu y los obligó a construir una tumba subterránea donde enterraría a los dioses embaucadores y la llenaría con todas las pruebas que estos habían creado. Una vez que los esclavos terminaron de construir la enorme y laberíntica cripta, Acererak asesinó a todos los esclavos y los encerró dentro de la misma. 
 
Elsenid hace una pausa, toma un trago de vino y continua. Les indica que hace unos 50 años, una manada de Yuan-Tis llegaron a la ciudad. Estos construyeron un templo subterráneo y desde entonces están intentando ingresar a la Tumba de los Nueve Dioses. Como si esto fuera poco, hace unos días, los Magos Rojos y acamparon en un complejo de ruinas y al parecer ya tuvieron encuentros con los Yuan-Ti, por lo que tendrán competencia a la hora de encontrar los tokens. Una vez que Elsenid termina de darles la información y el grupo termina de almorzar, deciden que en ese caso no deberían perder tiempo. El mago les indica donde pueden encontrar los templos mas cercanos y el grupo se pone en marcha.

El primer templo

Al ingresar al primer templo se encuentran con una habitación con varias estatuas y un mural donde se puede ver una especie de jaguar con serpientes como colas luchando contra lo que parece ser un grung. En el centro de la habitación hay una especie de pozo que lleva a un nivel mas abajo pero al estar enrejado solo Danki puede pasar. El enano comienza a bajar atado a una soga cuando de pronto, en el piso subterraneo una reja comienza a elevarse y cuatro criaturas de arcilla se aproximan hacia Danki. El enano corta la soga y comienza a batallar contra las criaturas. Hermes se aproxima a una puerta y se adentra por unas escaleras que desembocan en el piso subterranea donde se encuentra Danki, pero una reja se interpone en el camino impidiendole el paso.
 
Petros intenta atacar a las criaturas de arcilla con su ballesta una especie de barrera detiene el virote. Danki comienza a destruir a las criaturas de arcilla sin mucho problema y una vez que termina con las cuatro estas se desintegran dejando en el suelo solo las lanzas que llevaban en sus manos. Hermes le pide a Danki que le pase las lanzas y las coloca en las estatuas que se encontraban en la habitación principal. Cuando coloca la última, todas las rejas se abren y un placa que se encontraba cerca del mural comienza a elevarse revelando un cubo con el relieve del jaguar con solas de serpiente, el primer token.

El segundo templo

Con un token en su poder se dirigen al segundo templo. Al llegar se encuentran con que la puerta esta cerrada y contiene una cerradura. Elanord intenta forzarla pero tras unos minutos se rinde. Tras estar bastante tiempo buscando maneras de abrir la puerta y al no tener éxito, Hermes se aburre y se aleja un rato del grupo para tomar un descanso. Se acerca a un pequeño estanque y es allí cuando nota que la estatua del centro tiene la boca abierta,algo que le llama la atención. Mete la mano en la boca de la estatua y se encuentra con la llave que abre la puerta.
 
Al ingresar se encuentran con una fosa llena de pinchos en el fondo y cuatro vigas entrecortadas que hacen de comunicación con el extremo opuesto donde se encuentra un pedestal con el segundo token. Elanord pasa la primer viga, pero cuando va a saltar esta se tambalea y el semielfo pierde el equilibrio cayendo a la fosa. Hermes intenta hacer el salto pero sufre el mismo destino. Petros se sube a la primer viga e intenta ayudar a los que cayeron pero al estar demasiado tiempo sobre la viga esta se rompe haciendo que Petros caiga. Kranos tira una soga pero cuando Elanord intenta subir no puede sostenerlo y cae. Victorius es el último en caer tras intentar llegar al otro extremo.
 
Ratko tira una soga para que suba Elanord, y este pasa hasta el otro extremo de la sala. El resto se dispone a salir antes de que tome el token. Con la ayuda de Danki, Ratko aguanta el peso de Hermes, Petros sale y ayuda para que Kranos y Victorius salgan sin problemas. Elanord espera a que el resto salga del foso y una vez que todos se encuentran fuera del templo saca el token del pedestal. Inmediatamente la puerta se cierra y un humo verdoso comienza a llenar la habitación. Elanord reacciona rápido y empieza a buscar en su mochila hasta que encuentra un martillo y lo coloca encima del pedestal. Un segundo despues, el humo se disipa y la puerta del templo se abre nuevamente.

Emboscada

El tercer templo se encuentra cruzando un árbol caído y atravesando un antiguo pueblito. Mientras estaban atravesando el pueblo, escuchan un silbido y a Petros le impacta una flecha en la espalda. El grupo intenta encontrar de donde provino la flecha pero solo logran ver a una figura que desaparece por los techos de los asentamientos. Rápidamente el grupo se resguarda en uno de las construcciones para no ser atacados. Elanord intenta cruzar a la construcción de enfrente pero es atacado por un flechazo en el pie. Kranos corre a ayudar al semielfo y recibe un flechazo en la mano pero logra sacarle la flecha. Hermes y Danki aprovechan la distracción para separarse. El enano casi es alcanzado por una flecha que pasa muy cerca de su oído y cuando voltea logra detectar la ubicación del atacante.
 
El enano le indica al resto donde se encuentra el arquero que logra ocultarse en el último segundo. Elanord y Ratko se dirigen hacia el lugar que señaló Danki para encontrar al responsable pero el guerrero es sorprendido mientras subía las escaleras e inmovilizado por el atacante que resulta ser un tabaxi. Este mantiene a Ratko apresado y le pone una daga en el cuello pidiéndole al resto que se mantenga alejado. El grupo intenta negociar con el tabaxi preguntándole que es lo que quiere, y este responde que esta buscando el Anillo de la Luna. Tras intentar convencerlo sin éxito el tabaxi se dispone a alejarse con Ratko como prisionero, pero el guerrero logra liberarse en un movimiento rápido y el arquero cae por las escaleras pero logra incorporarse en el último segundo y comienza a huir.

Persecución

Los Lobos Grises comienzan a perseguirlo hasta que se ve acorralado y decide rendirse. Ratko lo maniata para que no intente hacer nada sorpresivo. El tabaxi dice llamarse Saco de Clavos y los invita a su morada para poder hablar. El grupo accede y lo lleva hasta su hogar maniatado. Allí, el tabaxi les explica que vino a Omu en busca del Anillo de la Luna y que solo quiere ese objeto por su valor. Hermes no le cree y esta seguro que sabe algo más sobre la tumba o los tokens pero que lo está ocultando y comienza a interrogarlo. Saco de Clavos insiste en que es lo único que sabe, pero el elfo no cree que los haya atacado solo por ese objeto por lo que intenta intimidarlo con Danki. Ante la negativa del tabaxi, Hermes le indica al grupo que se retire para dejar a Saco de Clavos solo con el enano.

Interrogatorio

Unos segundos luego de que el grupo dejara a Danki con Saco de Clavos, unos gritos desgarradores comenzaron a escucharse provenientes del sótano. Inmediatamente el grupo corrió a ver de que se trataba y lo que encontraron fue completamente inesperado: Danki estaba desnudo y lleno de puré junto a un Saco de Clavos que pedía clemencia y repetía que iba a decir todo lo que supiera. El tabaxi les indicó que solo estaba en Omu por el Anillo de la Luna y que este otorgaba a su portador la habilidad de ver en la oscuridad. Hermes no conforme con la información que el tabaxi le dió amenazó con dejarlo solo con Danki de nuevo pero este juraba que era todo lo que sabia.
 
Ratko asegura que el tabaxi es un peligro y quiere llevarlo como prisionero por la ciudad. Petros y Kranos se oponen ante la idea del guerrero. Hermes y Ratko insisten en que no es prudente dejarlo libre, pero el resto no cree que el tabaxi sea una amenaza aunque sea liberado. Victorius indica que no es ético lo que están haciendo y Ratko decide dejarlo a votación. El harper, Kranos, Elanord y Petros votan por dejarlo en libertad y Danki se abstiene de votar. Viendo que la opción de liberarlo fue la elegida, Ratko golpea a Saco de Clavos desmayandolo antes de liberarlo.

Ruptura

Cuando el grupo sale, Kranos comienza a discutir sobre que es lo que acaba de pasar pero ninguno se hace cargo y todos niegan que Danki haya abusado sexualmente del tabaxi. Aunque Kranos indica que está completamente seguro de que eso fue lo que sucedió y que no está para anda de acuerdo con lo que acaba de pasar, el resto del grupo cree que Danki no es capaz de hacer algo así. Sin decir otra palabra, el clérigo se mete dentro del sótano y cura a Saco de Clavos ante la mirada atónita del resto. El tabaxi despierta y se sobresalta al verlos de nuevo. Kranos le pide que se calme, que no va a hacerle daño y le pregunta que fue lo que le hizo Danki. Saco de Clavos responde que el enano lo abuso sexualmente.
 
Kranos comienza a acusar y cuestionar la moralidad el grupo. Arremete contra Danki por abusar del tabaxi, contra Hermes por incentivarlo, contra Ratko por golpearlo cuando estaba maniatado y contra Petros por no saber manejar a su escuadrón. Aunque Danki y Petros se notan arrepentidos, Ratko y Hermes discuten con el clérigo indicándole que no es nadie para juzgar sus acciones. El elfo le indica al clérigo que aprenda ellos van a imponer las reglas porque el forma parte de su grupo y se puede ir cuando quiera, pero Kranos le dice que no se equivoque que al contrario, ellos están con él: Omu es su ciudad y el puede sacarlos tan rápido como los hizo entrar. Es allí cuando Danki interviene y le pide perdón a Kranos indicándole que no va a volver a pasar. Petros le indica a Saco de Clavos que le darán el anillo si lo encuentran como muestra de su arrepentimiento.
 
Tras la discusión el grupo decide trabajar en equipo para conseguir el resto de los tokens y evitar cualquier conflicto que pueda aparecer. Aunque algunos no están del todo conformes aceptan ya que hay cosas mas urgentes que discutir. Pero algo es seguro y es que el incidente con Saco de Clavos marcó un punto de inflexión del que puede no haber retorno.