Mes de Shinjo, 1138 (Finales de Otoño)
Rokugán es una tierra antigua, y aunque los samuráis del Imperio Esmeralda a menudo optan por ignorarlos, ha sido el hogar de muchas razas no humanas a lo largo de su dilatada historia. Algunas de estas criaturas han sido enemigas, otras aliadas, pero rara vez son aceptadas por la rígida estructura social del Imperio. Los Nezumi son quizá la más numerosa de estas otras razas, pero la mayoría de los samuráis los consideran poco menos que alimañas ladronas. Ni siquiera la ayuda que algunas tribus de Nezumi prestaron al Imperio durante la Guerra de los Clanes y la Guerra contra la Sombra ha mejorado significativamente la percepción que la mayoría de los Clanes tienen de los "rátidos". La excepción, por supuesto, es el Clan del Cangrejo, que ha desarrollado una fuerte alianza con varios grupos diferentes de Nezumi, utilizando la resistencia innata de las criaturas a la Mancha para ayudar en su perenne guerra contra Las Tierras Sombrías.
Los Nezumi tienen más en común con los samuráis de Rokugán de lo que estos últimos están dispuestos a admitir. Más allá de su mutuo enemigo de las Tierras Sombrías, las tribus desempeñan en la cultura nezumi un papel similar al de los clanes: están lideradas por los guerreros más astutos, asesorados por consejeros que ocupan puestos similares a los de los shugenja y los cortesanos, y pueden surgir conflictos entre las tribus, al igual que entre los clanes. Los nezumi no suelen luchar entre ellos, ya que la supervivencia se considera una prioridad mayor que las cosas que llevan a los samuráis a la guerra, pero no es raro que diferentes tribus e individuos tengan agendas muy divergentes. Y, por supuesto, tanto los humanos como los Nezumi tienen héroes y villanos... y a menudo, la línea entre ambos puede ser difusa.
Durante la Guerra de los Clanes, los Oráculos Oscuros crearon los Terrores Elementales, un grupo de onis únicos con el poder de los propios elementos. El primer uso importante de estas terribles criaturas fue contra la tribu del Hueso Mutilado, una valiente banda de Nezumi cuyo territorio se encontraba en las profundidades de las Tierras Sombrías. Empujados hacia el norte, hacia la relativa seguridad del Muro del Cangrejo, los Huesos Mutilados se asentaron en tierras Hiruma sin utilizar, sin saber nunca que los Terrores habían sido enviados contra ellos debido a las acciones de uno de los suyos: Te'tik'kir, el chamán más poderoso de los Huesos Mutilados, había hecho caer a los Terrores Elementales sobre su propia tribu en un intento de hacer realidad su visión de unir a todos los Nezumi bajo el dominio de los Huesos Mutilados. Esto fracasó, ya que Mat'tck, el jefe, simplemente optó por reubicarse e intentar recuperarse en la medida de lo posible.
En los años siguientes, los Huesos Mutilados alcanzaron una paz tensa con las demás tribus nezumi de la zona, a pesar de los consejos habituales de Te'tik'kir de subyugarlos. Durante la Guerra contra la Sombra, muchos nezumi ayudaron al Imperio en la Marcha hacia Volturnum, y los Huesos Mutilados se ganaron el respeto de los Cangrejo por su destreza en la batalla. A medida que los Cangrejo han ido recuperando las antiguas tierras de los Hiruma, han desarrollado una relación de trabajo con los Huesos Mutilados: no son aliados cercanos, pero están unidos contra las Tierras Sombrías.
Por desgracia, los recientes trastornos en los Cielos han incitado a los Oráculos Oscuros a actuar de nuevo, y han decidido eliminar a la única criatura mortal que ha sobrevivido a su ira: Te'tik'kir. A principios de este año, los Terrores Elementales fueron enviados para destruir su tribu y devolverlo a los Oráculos Oscuros, pero el poderoso chamán pudo escapar con un remanente de su pueblo. Te'tik'kir ha huido hacia el norte de Rokugán, buscando a la mayor tribu Nezumi, los Oreja Rasgada, en su inmensa madriguera del Bosque Shinomen, y la ha protegido con el inmenso poder de su magia del Nombre.
Hace dos meses, las fuerzas del Clan Cangrejo bajo el mando de Hida Tsuneo recuperaron la antigua Ketsuen - Armadura del Guerrero de las Sombras, perdida en las Tierras Sombrías cuando Hida Yakamo fue asesinado por Kuni Yori. El Portavoz de la Sangre Jama Suru la escondió en una cueva, donde fue encontrada por un escuadrón de exploradores Hiruma y devuelta a los Cangrejo. Con la esperanza de que el Campeón de Jade Kuni Utagu pueda encontrar una forma de limpiarla, la Armadura ha sido enviada a la Capital, junto con un misterioso artefacto localizado cerca de la Costa Sombría y un conjunto de armas de cristal Kuni. Los Héroes de Rokugán, enviados para ayudar a escoltar este cargamento sin saber lo que contiene, se verán llamados a recuperar los preciados objetos y seguir el rastro de sus ladrones hasta el Bosque de Shinomen, donde tendrán la oportunidad de frustrar a los Oráculos Oscuros en su más reciente intento de matar al chamán maldito Te'tik'kir.
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