Se trata de una pequeña aldea fortificada situada entre las tierras de la Grulla y el Escorpión, a la que se ha concedido autoridad Imperial para gobernarse a sí misma. Se elige un gobernador entre las familias principales de la aldea, que gobierna la ciudad y las tierras circundantes con la ayuda de un puñado de guardias Ronin. Ocasionalmente, un pequeño destacamento de samuráis de los Clanes Menores más jóvenes también ayuda a proteger la zona. El santuario local más destacado está dedicado a Inari, la Fortuna del Arroz, y no es de extrañar, ya que la aldea está rodeada de fértiles arrozales y campos de grano. El excedente de la cosecha de cada año se vende a los mejores postores entre los Clanes Menores.
A mediados del siglo XII, se establece aquí el Dojo de Koeru Mura como centro de entrenamiento del ejército de la Alianza de Clanes Menores. A partir de entonces, una fuerza mixta de samuráis de los Clanes Menores se estaciona aquí permanentemente, asumiendo la responsabilidad de proteger la aldea y teniendo una voz fuerte en el nombramiento de su gobernador. La aldea se amplía con la adición de barracones para las tropas y campos de entrenamiento.