Seppun Takumi es una shugenja de poco más de veinte años a la que Otomo Kenzan tiene como asistente. Ella se encarga principalmente de pequeños trabajos para él y, en ocasiones, se le pide que use su magia para ayudar en la negociación cuando Kenzan no confía plenamente en la persona o personas con las que está hablando. Es una adicta al trabajo, no es especialmente extrovertida y prácticamente nunca tiene tiempo libre. Aunque no tiene un talento especial, su actitud de «trabajar hasta caer rendida» es una bendición para Kenzan.