En la tranquila ciudad de Rulid, el destino entrelaza los caminos de tres héroes que decidirán el destino del mundo en un futuro no demasiado lejano.
Warren, el héroe que salvó el pueblo del ataque de la Oscuridad, recibe la petición de ayuda de una desconsolada madre. Sus hijos adolescentes, inconscientes y buscando venganza por lo que ocurrió hace dos años, se han unido a los Perros del Pantano, bandido que asolan el pueblo y que pretenden matar a la Juez Olana. En su viaje a hablar con esos rufianes se le une Volk, druida de pueblo y un hombre solitario que oculta un terrible secreto.
Mientras tanto, la joven bardo Clayr/Quelenna, recién llegada al pueblo, comienza a mostrar interés sobre las vidas y los problemas de ese pueblo que le ha acogido tan bien. El ataque de las fuerzas de la Oscuridad, que provocó el ajusticiamiento de la niña Lianna, dejó una herida permanente en el corazón de Rulid y encendió una mecha que no iba a tardar demasiado en explotar. Dispuesta a ayudar, acaba aliándose con Warren y Volk.
Tras una charla con Gascon, el líder de los Perros, tan sólo la muchacha accede a volver con sus padres mientras que su terco hermano se queda con los bandidos. Pero ese no es el único problema con el que los tres nuevos amigos deberán lidiar: Adalia, una de las mujeres más ancianas del pueblo, sufre una extraña enfermedad. El galeno del pueblo, Joseph, teme que pueda ser altamente contagiosa. La única forma de curarla, además de arriesgarse al juicio de la Iglesia de la Trinidad, es elaborar un remedio que requiere un peligroso ingrediente: hongo violeta, una variedad monstruosa que crece en las Zonas Oscuras.
Warren finalmente logra extraer uno de esos hongos, arriesgando su alma y entrando en la Oscuridad. El brebaje, gracias a la ayuda de las alquimistas Shallistera y Shallote tiene éxito y Adalia es finalmente curada. Sorprendentemente, el héroe de Rulid no muestra síntomas de corrupción a pesar de haber estado expuesto a la Zona Oscura. Pero quizás su intromisión haya hecho que los seres de la Oscuridad se aventuren a salir, pues un pequeño de goblins y un Ogro estaban envenenando el pozo del pueblo. Los tres héroes los despacharon con facilidad, pero esto es tan sólo una avanzadilla de lo que está por llegar.
Otro ataque de la Zona Oscura parece ser más que inminente. A pesar de los esfuerzos de Quelenna, la brecha que separa a la Juez Olana del pueblo sigue presente... y quizás la única manera de que Rulid sobreviva sea superar esa división y luchar juntos contra lo que está por llegar.