Población:
92.697.
(90% elfos, 10% resto).
Gobierno:
Emperador, Thiras Berethryl.
Defensa: 6.492
soldados, 302 milicianos.
Comercio:
Cinco comercios, Martillo
Engastado de Pelltar Nyntynel, Hojas en el
Camino de Eradriel Filiadir, Burbujas del
Caldero de Lissa Urvor,
Hilos de Poder
de Meira Talavir, Astillero
Cisne Negro de Lyfalia Siannodel; una taberna, Encanto
del Bosque de Maeve Naelgrath; dos posadas, La
Cuchara de Oro de Taegen Aluianti, Estrellas Titilantes de Caelynn Xantrani.
Organizaciones: Un
Gran Templo de los Hijos de Ayndhil dirigido por el sumo
sacerdote Flambard, una sede del Gremio de aventureros dirigida por
Twyll Derunadel.
La
capital del imperio de Corell fue fundada en el 1416 EC, por la
diosa Kuvara, que le entregó un hogar a los elfos y sus
descendientes para que elevaran su arte y cultura. Aquí gobernaron
Celebor y Avala e instauraron las bases de gobierno del imperio, que
llegaría a través de sus descendientes a los días actuales.
Durante
un gran periodo de la historia de eektaia, Arathil fue la ciudad más
destacada por su arte, tanto en artesanía y pinturas, como en
arquitectura. Sus teatros estaban repletos de gentes de todo el
continente que deseaban ver las obras y conciertos de los dramaturgos
y músicos corelleis. A día de hoy siguen habiendo estas
actuaciones, pero la mayoría de obras o piezas musicales se enfocan
más en el drama que sufren los elfos tras la calamidad que desató
su antiguo emperador.
Las
gentes que residen en la ciudad se diferencian de los que lo hacen en
las aldeas aledañas por sus ropajes, más finos y a la última moda,
mostrando sus joyas para demostrar su poder adquisitivo. También
tienden a emplear un lenguaje más formal y siguen protocolos de
etiqueta.
La
ciudad está repleta de naturaleza, con grandes espacios para parques
arbóreos y flores de diferentes tipos. Sin duda es la ciudad más
limpia de Cylannar, sus caminos enladrillados de piedra son lavados
cada día, así como las verjas, estatuas y muros.