La actual portadora de la corona diamantina y máxima autoridad del reino de Arania es una mujer joven pero justa y llena de determinación. A pesar de no pertenecer a la línea de sangre real, la corona ha recaído en ella tras la muerte de sus cónyuges, la reina Saenna y el comandante Mael, en un atentado cuyo autor se desconoce. En ella recae el peso de la nación hasta que el joven príncipe termine su educación y pueda subir al trono.