El primer edificio construido en Nueva Voranor por los Pioneros de Eurana se encuentra en el centro de la ciudad, frente a la plaza que honra a los fundadores. Fue diseñado para ejercer también como centro político, por lo que incluye una gran sala de asambleas donde se dirimen asuntos de todo tipo. Varias salas de oraciones y una gran capilla para las ceremonias religiosas complementan su estructura. Tras ser destruido por un terremoto en 4631, fue reconstruido siguiendo el diseño original pero añadiendo un segundo piso y una torre circular con cúpula acristalada que sobresale del resto de edificios de la ciudad. Su fachada exterior de ladrillo rojo está decorada a mano con hermosas pinturas de los milagros de Eurana.
Datos generales
Ciudad pequeña: 8000 habitantes (66 % humanos, 12 % felínidos, 8 % mida, 1 % enanos, 5 % gnomos, 5 % medianos, 1 % arainas, 2 % otros).
Límite de dinero: 18 000 po.
Guardias: 120 guardias a tiempo completo.
Autoridad: Duque de Azur, consejo de vecinos.
Religiones mayoritarias: Pioneros de Eurana, Cofradía de Erekar, Mercaderes de Tamiko, Orden de Praxis.
Producción principal: Miel, pescado (arenques) y vino.
Historia
La pequeña ciudad de Nueva Voranor es un lugar donde comercio y religión se entremezclan en un crisol de mercaderes, sacerdotes, campesinos, viajeros y pescadores atraídos por la prosperidad económica o el culto a la diosa de la libertad.
Sus viejos edificios y sus puentes de piedra sobre el río Lascari dibujan un paisaje tranquilo y acogedor que ha pasado las últimas décadas apartado de los grandes conflictos de la región. Gobernados por un consejo de los vecinos más populares, liderado por el sacerdote supremo de Eurana, la mayoría de sus leyes se mantienen desde los primeros días de la ciudad y están basadas en las diferentes escrituras sagradas de los Pioneros de Eurana. Aunque las murallas de piedra se han quedado pequeñas y algunos viajeros se han visto obligados a construir sus hogares fuera, una parte importante de los que recorren sus estrechas calles son viajeros estacionales, que siguen la ruta de Azur tanto por tierra como por mar.
La ciudad se fundó en el año 4573 por un grupo de colonos de la lejana isla de Zabáriax, miembros de la Iglesia Blanca de Eurana que habían decidido seguir al profeta Numesie Thansi, un noble venido a menos al autoproclamarse profeta de Eurana que se vio obligado a huir de la isla ante las acusaciones de herejía. Muchos felínidos de Yugerten, también devotos de la diosa, se instalaron aquí poco después en busca de un lugar donde practicar su fe y el comercio. Desde entonces la ciudad ha crecido sin parar, impulsada por su posición como parada en la ruta de Azur y su acogida hacia los visitantes. El duque la considera una de sus posesiones más prósperas y acude anualmente a varias ceremonias sagradas de Eurana como muestra de respeto por sus habitantes.