Distintas criaturas han tenido a bien representar tremendas calamidades en la época anterior incluso a la de los mismos dioses. Estas criaturas no solo eran peligrosas en
poder, también en naturaleza, pues su única misión era alimentarse de violencia, de caos, de sugestión y mal hacer.


Estas criaturas fueron conocidas con distintos nombres en todo Mipsum, ahora, son los Seres Olvidados,  incluso fueron llamadas con nombres que hoy en día representan razas o desastres, cómo Diablo o Tornado, cómo Terremoto o Muerte.


El conocimiento que se guarda de estas criaturas es poco, codiciado y muy secreto, acceder a el puede ser pecado en vista de los dioses actuales. Libros, pergaminos, objetos malditos o Fab'Huritus se pueden encontrar en templos o mazmorras olvidadas, pequeños pasillos que conducen a palacios bajo tierra, árboles con raíces que guardan secretos. En todos estos sitios extraños y raramente accesibles o descubiertos, los nombres de estas criaturas descansan en papel, piedra o hueso, con historias sobre sus poderes, con información de cómo fueron.


Los dioses encerraron a los Seres Olvidados porque desafiaban su mismo poder, eran un peligro para todas las especies y su plan. Para que nunca se accediese a ellos, crearon un plano especial, un plano que se encuentra siempre detrás del plano material, donde ningún otro plano puede acceder a él, si bien es cierto, que el poder de estas criaturas es tan grande, que, dentro de ese plano, llamado “
Plano Perdido o Prisión Espejo”, se encuentran en una copia exacta del plano material, pero alterada por su existencia y en continuo caos, destrucción, a veces en paz si el Olvidado lo desea.


Los distintos Seres Olvidados, son criaturas razonables, no todas desean destrucción, algunas desean gobernar, otras comer, otras solo luchar, algunas solo existir, pero son todas, peligrosas. Después de los sucesos cerca de las montañas de
Amuradis, donde se descubrió una mazmorra que contenía un Fab'Huritu tan antiguo cómo el mismo mundo, que engañó a un grupo de aventureros y casi liberan a Diablo, la gravedad y el mal encarnados.


La
Orden de los Fab'Huritus comenzó la búsqueda de este, el cual se sabe que portaba una elfa que había sido dominada por su poder, aún en su búsqueda, cerca de las Tierras Monstruosas, en la ciudad pantanosa de Lorraizal, una saga codiciosa de poder (Beria), intentó convocar a Hemófago, señor de la sangre y las vísceras.
Si bien, ninguno de los dos Seres Olvidados llegó a entrar al plano material, la orden descubrió una conexión con el plano etéreo y la prisión espejo. Con el nombre de la criatura, un ritual de muy alto nivel con un alto precio y una manera de acceder al plano etéreo se puede convocar a uno de los primigenios a
Mipsum, con consecuencias devastadoras e inciertas.

La única pista es el Fab'Huritu fugado, que porta una elfa que huyó de Amuradis y su guerra. Las pistas conducen a las Tierras Monstruosas donde estos sucesos parecen estar relacionándose. No todos los Olvidados son poderosos cómo un dios, algunos son solo criaturas hostiles y salvajes, igual que en todos los planos habitan de todo tipo, pero en la prisión espejo ninguna criatura es menos débil que un dragón joven.