El Cauce de Aguasnegras es una ciudad que se ha formado con el paso del tiempo debido a su cercanía con las montañas y por su abundancia de agua, siendo en un principio un pequeño pueblo de viajeros que decidieron asentarse en la desembocadura de cuatro ríos, donde el agua de todos forma un lago de agua estancada y muerta, pero llena de vida dentro de los estándares de las Tierras Monstruosas. Con el tiempo el asentamiento creció a pueblo, los aventureros y viajeros cruzaban el cauce trayendo fortuna e historias, y debido a la naturaleza cambiante del lugar, sus gentes y la suerte de haber encontrado un buen sitio en las duras tierras monstruosas, se levantó un templo en honor a Avandra.

Con los años, el cauce pasaría a tener un tamaño respetable y sería considerada una ciudad en los estándares de las tierras monstruosas, manteniendo relaciones de comercio y amistad con la autonombrada capital de las tierras monstruosas, Fuerte Espada y otros lugares de importancia.

Cuando el cauce estaba en su mayor apogeo, una siniestra noche sin fin calló sobre el lugar, desgarrando las carnes de sus habitantes con espinas negras y raíces vivas. Un gran parásito comenzó a alimentarse de los vivos, trayendo muerte y desesperación a los pocos supervivientes.

Una clériga natal del cauce, Lucía, intentó detener por su cuenta lo que estaba sucediendo, teniendo sospechas sobre la naturaleza del parásito cómo un ser Olvidado: Nocturna. Por desgracia, Lucia, desapareció en su misión, pero consiguió hacer llegar una perturbadora carta al gobernante de Fuerte Espada, Dynn, quien sin muchos medios para ayudar a su amiga y a la ciudad vecina, envío cómo ayuda a los mercenarios que consiguieron liberar Lorraizal, Raúl y Nes, a Valdyn, un viajero que se ofreció voluntario para la misión, a Fenris, un jinete de la Hermandad de los Jinetes de Dragones que realizaba una misión diplomática y de buena voluntad en Fuerte Espada, y al Cabo Alcot de las fuerzas de defensa.

Después de una noche de terror, peleas y desenfreno, consiguieron liberar al cauce del ritual que invocaba al Olvidado, gracias a la ayuda de Alcot, salvaron a muchos civiles que habían conseguido huir de las raíces y espinas negras.

Descubrieron que los Oscuros, Olvidados poderosos y con influencia sobre la Prisión Espejo, estaban trazando un plan para destruir el estatus de cualquier Deidad actual y del mundo cómo se conoce, planeando el regreso de una época de caos.