Toshi no Gotei es, con diferencia, el mayor y más importante propiedad de las islas Mantis, situado en Shima no Kinu, la Isla de la Seda, junto a una bahía protegida en el lado occidental de la isla. En tiempos modernos es una de las ciudades más grandes de Rokugán, probablemente sólo superada por Ryoko Owari Toshi (La Ciudad de las Mentiras) y la Capital Imperial, Otosan Uchi(que, independientemente de su tamaño real, siempre se define como la ciudad más grande del Imperio).
Toshi no Gotei se fundó originalmente en el siglo I como una única fortaleza defensiva, con el ambicioso nombre de "Kyuden Mantis". Estaba situada en una llanura costera rocosa junto a una gran bahía que proporcionaba un puerto protegido, una ubicación ideal tanto para la observación como para la defensa, y un suministro inmediato de agua dulce procedente de pequeños cursos de agua que fluían desde el interior de la isla. A lo largo de los siglos siguientes, el asentamiento original no dejó de crecer. En algún momento del siglo V o VI, el nombre de la torre original -ahora un gran palacio- pasó a ser Kyuden Gotei, mientras que la ciudad en sí recibió el nombre de Toshi no Gotei.
El gran palacio de Kyuden Gotei, que domina la ciudad, es un reflejo directo del propio clan Mantis. Es elaborado, incluso ostentoso, lo que demuestra claramente que los Mantis están más que dispuestos a permitirse sus propios gustos sin tener en cuenta los estándares convencionales rokuganeses. El castillo está construido con piedra de color verde oscuro y rojo óxido, toda ella extraída de la isla; está enmaderado con ricas maderas exóticas, techado con cobre bruñido y decorado con estandartes y esculturas de piedra y madera que reflejan tanto la sensibilidad rokuganesa como la gaijin. El interior es aún más elaborado, decorado con piedras semipreciosas y preciosas, metales raros como el oro y la plata, un sinfín de plantas en flor y numerosos pájaros y lagartos de colores en jaulas doradas.
Kyuden Gotei también tiene sus secretos. El más notable es la presencia bajo el castillo de numerosas cuevas y túneles, que se cree que son artefactos de la actividad volcánica que dio forma a las islas. Sólo unas pocos Mantis, principalmente la Legión de la Tormenta -la guardia personal de élite del Campeón del Clan-, saben navegar por estos sinuosos pasadizos, que proporcionan vías subrepticias de entrada y salida del palacio, así como lugares ocultos para actividades nefastas como el contrabando. En las profundidades del castillo se encuentra el Banco del Cielo, principal depósito de la riqueza física del clan Mantis. El acceso a este lugar está limitado al Campeón del Clan, el daimyo de la familia y el puñado de personal y guardias asignados a él. Esto se debe a algo más que meras cuestiones de seguridad, por estrictas que sean; también se debe a que muchos de los tesoros de la Bóveda son de origen gaijin, obtenidos de los Reinos de Marfil o incluso de las lejanas tierras de Meranae y Thrane. Aunque la adquisición de tales artefactos gaijin es menos problemática en los tiempos modernos, durante la mayor parte de la historia de Rokugán la posesión de tales cosas es altamente ilegal.
Durante los mil años de existencia del clan Mantis como clan menor, Kyuden no Gotei fue el centro de la política y la diplomacia del clan. Fue aquí donde nació la Alianza de Yoritomo, la alianza de clanes menores que desempeñó un papel clave en la Guerra de los Clanes. Tras su ascensión a la categoría de Gran Clan, los esfuerzos diplomáticos de los Mantis se trasladaron en gran medida al continente, especialmente a la Capital Imperial, pero Kyuden no Gotei sigue siendo la sede del poder económico y militar de los Mantis. Aquí se acuartelan tanto la Legión de la Tormenta como la Guardia de Élite Yoritomo, y es la sede del dojo principal de los bushi Yoritomo, a los que se entrena no sólo para luchar, sino también para navegar en los barcos del clan. Una de sus tradiciones anuales es la competición de kobune conocida como "La Carrera". Destinada principalmente a entrenar y poner a prueba a los marineros, La Carrera también sirve a veces como medio formal de resolver disputas entre samuráis de Mantis (en lugar del duelo iaijutsu, más común). El puerto de la ciudad, por su parte, es el cuartel general de la armada de los Mantis. Al menos una de las tres (y, a finales del siglo XII, cuatro) flotas conocidas como Tormentas siempre tiene su base aquí.
La ciudad de Toshi no Gotei tiene otros lugares notables aparte de los activos militares del clan. Hay innumerables casas de té y restaurantes en la ciudad, la mayoría de ellos centrados en el marisco, que es el núcleo de la dieta de las Mantis. Entre los establecimientos más destacados se encuentra La Sonrisa de la Anguila Marina, una de las principales casas de sushi de Rokugán y una de las pocas que se atreven a servir fugu, un alimento derivado de un pez globo altamente venenoso. La ciudad también alberga numerosos templos y santuarios, ya que los mantis son supersticiosos incluso en comparación con otros rokuganeses. El mayor templo de la ciudad está dedicado a Daikoku, la Fortuna de la Riqueza. Dado el punto de vista de los mantis sobre la riqueza y la adquisición material, no es de extrañar que éste sea uno de los tres mayores templos del Imperio dedicados a esta Fortuna.