Los cambions son la descendencia que surge del cruce entre un infraplanar (generalmente un íncubo o súcubo) y un humanoide (normalmente un humano).
Los cambions heredan los rasgos físicos de ambos progenitores, pero cuernos, alas correosas o una cola tendinosa pueden ser marcas distintivas de su origen ultraterreno.
Los cambions crecen hasta convertirse en adultos despiadados, cuya maldad y perversión horroriza al padre mortal más devoto. Ya desde su niñez, reconocen su legítimo lugar como amos y señores de los mortales. Podrían fomentar revueltas en pueblos y ciudades, reuniendo bandas de humanoides y diablos menores a su servicio.
Los cambions obligados a servir a su progenitor diabólico lo hacen tanto por su fascinación por él como por el miedo que les produce. Además, al hacerlo, aspiran a obtener un puesto en la jerarquía infernal. Los cambions criados en los Nueve Infiernos sirven como soldados, mensajeros o asistentes personales de diablos, aunque muchos son repudiados por su mezcla de sangre o envidiados por estar fuera del orden establecido. En el Abismo, un cambion posee tanta autoridad como pueda ejercer gracias a su fuerza y voluntad.