Kestkrezah, conocida también como el Segatormentas, es un feroz dragón azul adulto que encuentra su morada en una costra sangrienta de Averno que cubre unas antiguas ruinas ahora desoladas. Esta formidable criatura mantiene una existencia llena de intrigas y conflictos en el inhóspito paisaje infernal.
Atormentado de la venganza de Balarystul, la dragona de cobre anciana, Kestkrezah vive en constante alerta. Ha llegado a creer que todos los humanoides que se acercan a su guarida, especialmente clérigos, son espías de su rival y trabaja incansablemente para evadir su persistente persecución.
Kestkrezah es un buscador de tesoros incansable, y su anhelo de riquezas no se limita a la acumulación de metales preciosos en Averno. A través de su insaciable búsqueda de tesoros de dragones provenientes de otros planos, planea aumentar su visión dracónica de otros mundos y, con ello, su poder y conocimiento a lo largo del multiverso.
Aunque en un pasado lejano perteneció a un Lauth, un clan de dragones que adoraba a Tiamat, la madre de los dragones cromáticos, Kestkrezah renunció a su lealtad después de la pérdida de su compañera y sus crías. Ahora, en lugar de servir a los dioses, prefiere ofrecer sus habilidades y recursos al mejor postor, como bajo el manto de la archiduquesa Azor, cuyo poderoso dominio sobre Averno atrae su interés y ambición.
Tras amasar una pequeña fortuna controlando un paso entre montañas en el límite de los Páramos, fue asesinado por la La Égida.